Desde las nuevas políticas aplicadas a la educación pública, y sobre todo a partír del año 2008 en donde se crea la ley de obligatoriedad de la escuela secundaria, el Estado Nacional desarrolla una serie de programas para hacer viable y darle contenido y sustentabilidad a la ley en cuestión. Hermoso, increible. Uno de los programas más conocidos es "Conectar Igualdad" el de las netbooks, pero hay muchos más. El año pasado fue un año muy dificil. Llegué de Santa Cruz luego de más de 3 años de trabajar allá en un hospital público, y de realizar el posgrado de Nación en Salud Comunitaria. En la dura lucha de reinstalarme en Córdoba laboralmente, me llega la oportunidad de presentarme a una convocatoria para trabajar en uno de estos planes, el Plan de Mejora Institucional (PMI). Más allá de la especificidad del trabajo, les aseguro que el programa se basa en todo lo que muchos de nosotros, los que creémos en la importancia de una buena educación pública, creémos necesario para una transformación seria y más justa de una sociedad mejorada. Este programa, como muchas otras acciones del estado, muestra en muchos casos poca eficacia, malos manejos, condiciones de precariedad para los técnicos que lo llevamos adelante, para los docentes que se incorporan al mismo, manteniendo situaciones de maltrato en pagos, siendo en nuestro caso monotributistas, con pocos derechos, demoras, burocracias, etc. Sin embargo uno crée que es cuestión de tiempo, lo justifica y sigue adelante.La situación de final de año era límite para todo el equipo de trabajo. había pasado el 20 de diciembre, nos debía 4 meses, no había respuestas sobre viáticos (entiendase gastos ya realizados por los técnicos), sobre la recontratación de enero para el nuevo ciclo, etc. Esta situación llevo a que algunos de nosotros 8aunque con la adhesión de casi todos) nos juntemos a conversar, y nos planteamos que en la reunión de cierre de año, en donde habría autoridades, pediríamos algunas respuestas.Una de las cosas que me pasaban en lo personal, era sentir que "formábamos parte de algo" que proponía una mirada inclusiva, de respeto, de consideración de las personas, cualquiera sea su estrato social, político, ideológico, y que sin embargo se nos estaba maltratando mucho, generándome grandesa contradicciones.El día de la reunión, tal como estaba pautado por el equipo, planteamos la necesidad de respuestas antes de continuar con el cierre. Era realmente una necesidad, por eso lo hicimos. En la reunión hubieron muchas cosas, pero en ningún momento hubo planteos irrespetuosos o salidops de tono "de nuestra parte". En un momento, ante el planteo que estas son las condiciones, que si nos gustan bien, y si no que nos vayamos, tomo la palabra y pido que no caigamos en la metodología del neoliberalismo, que sentía que este plan apuntaba a otra cosa... Muy ingenuo lo mio. En el momento que pronuncié la palabra "neoliberalismo" (juro que lo hice sin otra intención que no sea analizar nuestra situación), el Señor Santiago Lucero, que es una autoridad del Min de Educación de la provincia, se puso eufórico y comenzó a gritarme, a maltratarme, y tirarme "sus desaparecidos" como modo de argumentar (?) que no iba a permitir que le diga neoliberal. Luego de su exsabrupto (fue bastante desubicado), le pedí hablar, me dio la palabra, y le expliqué a qué me refería. Tal fue el cierre de esa controversia que al finalizar el encuentro, se acercó y me pidió disculpas. Luego de un duro, durísimo, y muy entregado año en la búsqueda de trabajo, en esa época me salió otro trabajo, como tutor del Posgrado en Salud Comunitaria. Como ya estaban cubiertas mis necesidades, pese a que lo busqué por más de un año, rechacé el trabajo.Terminé un año muy feliz de haber concretado mis objetivos. pasé un enero de descanso mental, de vacaciones, de tranquilidad. Comienza febrero, y desde la coordinación convocan a a reuniones, pero ya no del equipo completo, sino de a grupo de 5 profesionales más o menos, a la cual no me invitan. Intento comunicarme, y nada. Mi "jefa directa", Silvina Chali, no contesta mis llamados ni mis mensajes. Comienzo a indagar y me empiezo a preocupar. Esto movilizó a varios compañeros con quienes nos juntamos. Algunos ya habían tenido estas "reuniones informativas" en donde las autoridades se mostraron muy molestos por una nota que habíamos hecho a fin de año, y por lo acontecido en general en la reunión. Se dejó ver asimismo que me habían excluido con frases como "el que nos dice neoliberales que se la banque". No sólo no me renovaron el contrato sin aviso previo, y perjudicándome abiertamente a nivel laboral, económico, emocional, etc, sino que no hubo ni siquiera una persona capaz de darme respuestas...Así estoy hoy, contrariado, dolido... Resultó que en este hermoso contexto nacional, en medio de este programa, me encontré con una realidad que todavía me cuesta digerir. "Ojo con hablar", que te hechamos!!!Puff, mis compañeros/as no quedaron muy bien tampoco... Les queda un año por delante conviviendo con esto...A ellos, al programa, a la educación inclusiva, les deseo lo mejor. No así a estos "falsos progres", jodidos HDP, capaces de caer en medidas que justificarían mis dichos si en realidad hubiesen sido como los interpretaron, desde la lógica más canalla del neoliberalismo de extorsionar con miedo a perder el trabajo...Es de una tristeza enorme lo que me acaba de acontecer...Gracias por leer esta nota...
CARLOS VIALE
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